domingo, 2 de enero de 2011

“Oídos sordos” (a M†)














Intentaré no perjudicarte,

creo que eres buena niña.
Ha sido un placer encontrarte
y tropezar en tu vida.

Siempre me regalas una sonrisa,
aunque a veces me vuelvas loco.
Te portas bien y me cuidas
haciendo oídos sordos.

Fan incondicional,
casi miope y sin criterio.
Estoy empezando a pensar
que te caíste del cielo.

Más lista de lo que pensaba
me escondiste en tu cuarto,
creyendo que no lo contaba
cuando me estaba escapando.

Intentaré estar cerca porque sé
que también lo pasas mal,
aunque no siempre sepa que hacer
para poderte ayudar.

(02.01.2011)

2 comentarios:

  1. “No hay perfume sin olor”

    ¿Golfo o loco?
    ¿Encantador o Canalla?
    Me enloquece mirarte,
    pero aun no se que guardas.

    Gracias por cruzarte
    enseñarme tu punto de vista,
    tomo nota de lo que añades
    para enriquecer mi sonrisa.

    Tan incondicional de la vida
    tan hostil de lo superfluo,
    sé que hasta el más bello ángel
    detenta su misterio.

    No hay inocencia sin picardía,
    ni frío sin calor,
    ni lluvia sin agua,
    no hay perfume sin olor.

    Sosiegas mi caballo,
    a veces acobardado,
    es un placer que me montes,
    y que te quedes observando.

    ResponderEliminar
  2. Bonito regalo! Genial!

    Muchas gracias!!!

    ResponderEliminar