He llegado a mi escondite,
donde las olas se vuelven espuma,
donde pisadas grabadas
son sólo huellas desnudas.
Rompe el mar sobre las rocas
que solas sólo permanecen.
Atardece y ajeno a miradas
escribo palabras que mueren.
Y me transporto a algún lugar
donde poder describirte
y sólo seas una.
Y los segundos que no podemos hablar
son horas que invisibles
te dibujan.
(01.11.2010)
donde las olas se vuelven espuma,
donde pisadas grabadas
son sólo huellas desnudas.
Rompe el mar sobre las rocas
que solas sólo permanecen.
Atardece y ajeno a miradas
escribo palabras que mueren.
Y me transporto a algún lugar
donde poder describirte
y sólo seas una.
Y los segundos que no podemos hablar
son horas que invisibles
te dibujan.
(01.11.2010)
No hay comentarios:
Publicar un comentario