“Iceberg”

Sé que lo sé porque no hay más,
eres la única a la que no comparo,
ni hablo por hablar,
ni frivolizo ni desarmo.

Y yo que no creía en los flechazos
ni en tu inconsciente impulso suicida,
que ya no buscaba abrazos
ni tomaba medidas...

Te deseo por las cosas que te sé,
te quiero por las que aun no conozco,
pero tirarme por la ventana fue
mala forma de salir airoso.

No sé si está claro o borroso
pero no puedo guardarme el corazón,
es otro de mis desperfectos odiosos
que acrecientan el tropezón.

Pendo de la delgada espera
de las caderas en las que espero,
como el iceberg que en goteras
sólo muestra agujeros.

Pie de guerra al aguacero,
pies en el suelo frente al amor,
dique seco en los astilleros
de los recovecos del dolor.

(27.06.2010)